El módulo de transmisión de EnOcean obtiene sus cantidades mínimas de energía de su ambiente. Cambios de temperatura mínimos, pocas vibraciones, cambios de presión, movimiento y luz tenue: todo esto es producido por la energía utilizable y que puede ser enviada como señal. El gran adelanto tecnológico de EnOcean hizo posible reducir la energía requerida para la transmisión de la señal, a cantidades mínimas increíbles. Este cambio en los requisitos energéticos conduce a que los sensores de EnOcean funcionen donde otras tecnologías no son aplicables (por ejemplo luz tenue en el interior de edificios).
Los módulos de transmisión más acostumbrados son suplidos con corriente a través de piezocristales, células solares o producción de energía electrodinámica.
A través del empleo de la tecnología patentada, EnOcean está en la posición de componer una señal de largo alcance con cantidades mínimas de energía ambiental.
Con solo 50µWs, un módulo de transmisión de EnOcean puede enviar una señal mayor de una distancia de 300 m.
El secreto está en la duración de la señal: el proceso completo es originado, ejecutado y concluido en solamente una millonésima de segundo (1µs Nota. d. T.).
Los módulos de transmisión de EnOcean funcionan en su regulación estándar en la banda de frecuencia de 868,3 MHz libre de licencia. Está banda de frecuencia ha resultado ideal para el uso en distintas partes del mundo. Es exclusivo para transmitir datos de corta duración en Europa. Además el promedio de intensidad de campo es bajo y por ello la banda de frecuencia seleccionada es suficiente para los requisitos de los mercados de Estados Unidos y Canadá.